Días difíciles

Al parecer estamos en temporada de nudos en la garganta y corazones en puños.

Qué poco importan los logros académicos o laborales cuando hay miedo constante a perder a alguien muy importante. Llevo varios días, bueno, semanas, tratando de ser la versión más fuerte de mi.
Este 2018 viene con intención de llevarse mucha gente, lo estoy viendo venir y estoy aterrorizada.

Me siento agotada, pero no físicamente. Me siento exhausta emocionalmente. Tengo el alma saturada de malas noticias. Me da miedo no poder aguantar este tirón, el cuál, será seguramente uno de los más duros de mi vida. Los pilares de mis pilares están envejeciendo y luchando batallas muchas veces imposibles. Y como mi guerrera, cuanto estoy sufriendo por todos. Cuanto la entiendo ahora.

Tengo pánico a leer esos mensajes que auguran océanos de lágrimas. Tengo el corazón a punto de estallar en ganas llorar.

 No sé qué decir ni que hacer. No sabéis las veces que he escuchado la palabra cáncer en estos últimos días. Y simplemente me encuentro devastada. Desde hace tiempo aprendí a buscar el lado positivo de todo y prácticamente siempre lo encuentro, pero os juro que esto no lo tiene.

Intento pasar las horas leyendo con tal de no pensar. Con tal de no darme cuenta de que el tiempo está volando en nuestra contra.

Cuanta falta me haces ahora mismo. Cuanto necesito que me abraces sin más.
Ha sido quizá nuestro mejor San Valentín y no he podido disfrutarlo porque a la única persona que quiero más que a ti está cansada de luchar por seguir latiendo.

Me voy a la cama, porque dicen que dormir lo cura todo, y hoy ha sido un día duro donde los haya.

Que miedo tengo de que llegue mañana.



Comentarios

  1. Hostia puta, que bueno .
    Me has remontado unos años atrás .
    Un abrazo de los que estrujan y ánimos, no hay consuelo 💋

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares